jueves, 5 de enero de 2017

Karen Robards

                                                                                                       JULIA:                                                                                                                                                 La golfilla callejera Jewel Combs no tenía más futuro que la prostitución y la vergüenza. Entonces, un caballero moribundo miró sus ojos color topacio y su inocencia sin corromper… y se casó con ella para atormentar a su aristocrática familia con una última y escandalosa broma tras su muerte.            Pero Sebastian, conde de Moorland, no encuentra nada cómico en la descarada y joven viuda que reclama la herencia de su primo… no en la ardiente sensualidad de esta joya sin pulir. Mientras la valora con sus gélidos ojos azules, se preguntaba si podría ser divertido pulirla hasta convertirla en una dama, llamarla Julia Stratham… y seducirla.            Jewel ha conservado su virginidad en medio de los hombres más rudos de Inglaterra, pero cuando este apuesto lord posó su boca sobre su ardiente carne, un fuego irresistible la consumió… y aunque él la llamara lasciva, Jewel juró ser la dama que él amara esa noche… y por siempre jamás.

1 comentario:

  1. No me gustó. He leído algunas críticas en otros sitios y he visto que algunas lectoras la consideran como una historia bonita, incluso preciosa.
    Mi opinión es otra. Tuvo un comienzo interesante, la trama daba para que fuera realmente una historia preciosa; tuve expectativas, incluso, más allá de la mitad de la novela, pero luego se fue desenvolviendo de una forma que me resultó completamente desagradable. El personaje femenino era mucho mejor que el masculino (éste nunca me gustó, pensé que cambiaría, pero nunca lo hizo, ah sí "el amor lo persona todo"). Sin embargo, ella, avanzada la novela, por puro despecho, se aprovechó de alguien; creo que una chica digna no haría eso. Me parece que eso mostró que no era tan decente como la autora quiso hacernos ver.
    En fin, me pareció una novela poco romántica pues los personajes no me convencieron ni la supuesta grandeza del amor tampoco. Él protagonista fue más desagradable qué ella (pero ella no se salva). Pienso que personajes así pueden tener su historia de amor pero de forma paralela o secundaria a otra historia más bonita, verdaderamente romántica. Ellos no se merecieron ser los personajes centrales de esa supuesta historia de amor.
    No cuento los detalle para no desbaratar la trama. Sé que habrá lectores que sí la disfrutarán. En fin, no es de gusto, no la recomiendo.

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