Lyn Stone
CONTRA EL TIEMPO: Guapo, intrépido y experimentado. Sin la menor
duda, Sean Wilder era el elegido. Parecía el candidato perfecto para brindarle
vivencias más intensas en los pocos meses que le quedaban de vida. Sólo le
quedaba convencerlo de que se casara con ella.El investigador Sean Wilder notaba algo
extraño en la propuesta de matrimonio de Laura. Era la personificación de la
salud. Pero aquella mujer bella e inocente estaba convencida de que se moría.
Por lo visto, dependía de él demostrarle que el diagnóstico, obviamente, era un
gran error.
Qué argumento más original. No recuerdo haberlo leído.
ResponderBorrarMuchas gracias Jesica.
Besos, Mariad.