Elisa Braden

                                                    Serie Midnight in Scotland                                          4-The Wickedness of a Highlander:                                                                                              Un ángel en caída libre.

Un año atrás, Sabella Lockhart vivía resguardada como la hermana de un lord escocés. Entonces salieron a la luz los espantosos crímenes de su hermano, dejándola con nada más que horribles recuerdos, deudas impagables y un nombre manchado. Antes de abandonar Escocia para siempre, debe enfrentarse a la familia a la que él más daño ha hecho: los MacPherson. Pero cuando un robo de las Highlands le arrebata todo menos el vestido que lleva puesto, se ve obligada a aceptar la ayuda del MacPherson que la desprecia más que ningún otro. El único hombre al que no puede olvidar.

Un demonio que arde en deseos de venganza.

Alexander MacPherson no ha olvidado a Sabella Lockhart ni por un maldito instante. Ella es la razón por la que recibió un disparo, la razón por la que soportó una recuperación infernal, la razón por la que no ha dormido profundamente en un año. Así que, cuando ella aparece desamparada y sin dinero en la taberna del pueblo, él le ofrece un puesto, como su criada. Dejaría que ensuciara esas manos inmaculadas fregando suelos. Que se ganara los vestidos de seda chelín a chelín. Nada podría ser más satisfactorio que tenerla durmiendo bajo su techo y siguiendo sus órdenes. ¿Era despiadado? Absolutamente. Pero esa es la trampa en un trato con el diablo. Siempre se lleva más de lo que le corresponde.

Una colisión entre el cielo y el infierno.

Cuando Sabella se enfrenta a su desafío, su fuego pone a Alexander de rodillas. Pero ella no sabe lo despiadadamente que él luchará por mantener a un ángel a su lado. O lo peligroso que puede ser un demonio cuando la mujer a la que desea más que al aire y al whisky se ve amenazada por un pasado que no permanecerá enterrado.